LEGISLAR EN CALIENTE

Acababa de amanecer en Londres aquel 14 de junio de 2017. Un fallo en una nevera de uno de los 120 apartamentos de la Torre Grenfell provoca el incendio más devastador en un edificio de viviendas del Reino Unido, con al menos 71 fallecidos. Todos los materiales que separaban aquel frigorífico del exterior ardieron sin resistencia y propagaron las llamas en tiempo récord sin que los servicios de extinción pudieran hacer nada por quienes quedaron atrapados en el interior. Desde entonces se han supervisado cientos, miles de edificios y se ha endurecido la normativa hasta ponerla al nivel de los países más exigentes.
Octubre de 2013. Tras el accidente del Alvia en Santiago, en el que fallecieron 79 personas, la ministra Ana Pastor pide a la UE la implantación de cinturones en los trenes y de un sistema de fijación de equipajes.
Alguien podría argumentar que este tipo de cuestiones no deben legislarse en caliente, pero es que es precisamente a partir de excepcionales tragedias, de las que se aprende y toman medidas para intentar evitar que se repitan. No hacerlo sería irresponsable.
11 de Marzo de 2018. Los cuerpos de seguridad detienen a la pareja del padre de Gabriel cuando trataba de trasladar el cuerpo sin vida del pequeño. Aparentemente no había antecedentes, ni indicios que hubieran permitido prever tan terrible tragedia, por lo que nada, ni nadie pudo evitarlo.
Octubre de 2009. Alejandro Martínez Singular, conocido como violador del Example, era detenido por intentar violar a una niña de 12 años. Era la cuarta vez que reincidía desde que abandonara la prisión en 2007 tras cumplir 16 de los 65 años de prisión a los que fue condenado por 10 agresiones sexuales. La pregunta es muy sencilla. Por qué abandonó la prisión tras ni siquiera cumplir una tercera parte de la condena y se le permitió sumar cuatro nuevas víctimas?
Febrero de 2018. La policía detiene en Sevilla a un conductor borracho, sin carnet y con un saldo negativo de -72 puntos. Afortunadamente antes de estrellarse contra algún inocente.
Ahora toca reflexionar sobre legislar en caliente y tratando de evitar que inocentes paguen las consecuencias de los actos de seres que no tienen ninguna intención o capacidad de reinsertarse.